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¿No sabes qué productos utilizar? ¿Te pones muchos productos y no sabes bien el orden? ¿Qué es lo mínimo que debes usar?
En este post te lo contamos con todo lujo de detalles, así que te recomendamos que sigas leyendo para no perderte nada.
En qué consisten las rutinas de belleza
Las rutinas de belleza son un conjunto de actividades o productos que una persona utiliza para cuidar su piel, cabello y cuerpo con el objetivo de o mejorar su apariencia física.
Estas pueden incluir desde simples acciones como que producto utilizar para la limpieza, el orden que deben de seguir los productos, cuáles son los cosméticos mejores para ti, cuáles son los pasos fundamentales, hasta como mejorar añadiendo algún paso extra, estas rutinas pueden variar dependiendo de las necesidades individuales y preferencias de cada persona.
Además, las rutinas de belleza te ayudan a mantener una piel sana y radiante, prevenir el envejecimiento prematuro, hidratar la piel, reducir la apariencia de arrugas y manchas. Sin embargo, es importante recordar que cada piel es diferente y es importante consultar a un dermatólogo o profesional de la belleza antes de comenzar cualquier rutina de belleza, especialmente si tienes problemas de piel o requieres tratamientos específicos.
También es importante adaptar la rutina de belleza al estado de tu piel. Además de los productos y procedimientos, también es importante tener una dieta saludable y equilibrada, beber suficiente agua y tener un estilo de vida activo y saludable para mantener una piel y cabello radiante.
Pasos básicos en una rutina de belleza
A continuación, mostramos cuáles son los pasos a seguir y los productos que debes utilizar para realizar una buena y efectiva rutina de belleza para conseguir una piel sana y cuidada. Las vamos a clasificar según la cantidad de productos que te gusta ponerte. Porque la mejor rutina es la que más se adapta a ti, la que vas a comprometerte a seguir todos los días.
RUTINA BÁSICA
Esta es la que debes seguir sí o sí, si quieres tener una piel sana, en buen estado y con una función barrera que te proteja.
1. Limpieza:
¿Por qué es tan importante la limpieza?
Es un paso fundamental porque de ella depende la salud de nuestra piel, la capacidad para defendernos de agresiones externas como los patógenos y de retener el agua que contiene nuestra piel para no deshidratarnos.
¿Por qué no limpiarnos con agua?
Porque el agua no limpia, no nos retira la suciedad de nuestra piel, los restos de cremas, solares, maquillaje, contaminación… ¿A qué lavas con jabón la piel de tu cuerpo? Igual de necesario es la de tu cara.
Para ello lava el rostro con un limpiador suave para eliminar la suciedad, el exceso de sebo y los restos de maquillaje, es muy importante que tenga un PH entre 4.5-6.5, parecido al de nuestra piel, de lo contrario alterara su equilibrio. Por ejemplo, los jabones en pastilla, el gel del cuerpo, gel de manos… tienen un pH básico, aproximadamente 9-10, son limpiadores muy potentes que nos retiran las sustancias necesarias en nuestra piel para protegernos de las agresiones externas.
Es importante lavarse la piel mañana y noche y secársela después a toquecitos con una toalla lo más suave posible, nada de friccionar muy fuerte. Hay muchos tipos de limpiadores, para pieles secas una leche limpiadora es lo más adecuado y textura gel para las grasas y mixtas. Si tienes la piel sensible hay que buscar un limpiador muy suave que lleve principios activos calmantes.
2. Protección solar:
Una correcta protección solar nos previene del envejecimiento y del cáncer de piel.
La radiación solar es la principal causa del envejecimiento, responsable de la perdida de firmeza y arrugas, estas aparecen porque la radiación destruye las fibras que nos sostienen la piel. Además, nos produce manchas, aumenta la producción de sebo, dilata los poros… y muy importante puede causar cáncer de piel. Por lo que una protección solar es la mejor crema antiedad.
Hoy en día hay muchísimos protectores solares, elige uno de amplio espectro, es decir, que te proteja de las principales radiaciones del sol, UVB, UVA, IR y VIS. Muy importante que te guste su textura y que se adapte a tu tipo de piel, si tienes la piel grasa o con acné es muy importante que sea oil- free, si tienes la piel seca puedes buscar que además lleve un extra de hidratación, si tienes la piel sensible o con rosácea debes optar por uno mineral y si tienes manchas uno con despigmentantes.
Debes de reaplicar a lo largo del día si estás expuesto al sol, utilizar la cantidad recomendada y utilizarlo todo el año.
RUTINA MEDIA
Si te gusta ponerte más productos, pero no muchos, esta puede ser la rutina que más se adapte a ti. Los dos primeros pasos son iguales a los comentados anteriormente.
1. Limpieza.
2. Contorno de ojos: Según sean las necesidades de nuestro contorno podemos buscar el principio activo que más nos convenga, por ejemplo, si tenemos ojeras oscuras podemos buscar cosméticos que tengan ácido tranexamico entre sus ingredientes, si tenemos bolsas, la cafeína es nuestro mejor aliado. Lo importante es que lo utilices justo después de la limpieza para protegerlo de lo que puedas poner después, ya que hay sérums o cremas que pueden irritar el contorno de los ojos, si es una piel más fina y delicada.
3. Sérum: Aplica un serum con ingredientes activos para tratar problemas específicos de tu piel, como el envejecimiento, la hidratación o las manchas. Por el día recomendamos utilizar un sérum antioxidante, es el que nos va a ayudar a protegernos del medioambiente. Y por la noche utilizaremos un sérum que nos ayude con lo que queremos mejorar de nuestra piel, para reducir arrugas y firmeza lo mejor es el retinol, si nos preocupan más las manchas, un despigmentante con activos como el tranexámico, ácido kojico, niacinamida, etc, si tenemos los poros muy dilatados, sucios y la piel muy gruesa podemos utilizar alfa hidroxiácidos.
4. Crema hidratante: Aplica una crema hidratante para mantener la piel hidratada y nutrida, es importante que se adapte a tu tipo de piel.
5. Protector solar, de amplio espectro, como explicamos en el apartado de rutina básica. Y obviamente solo de día, y sí, todos los días del año, no solo en verano, porque el sol nos da en la cara todos los días, y hay radiaciones que atraviesan las nubes, los cristales y que nos perjudican mucho la piel.
RUTINA AVANZADA
En esta rutina añadiríamos un paso después del contorno de ojos, que sería una loción o esencia y un tratamiento semanal.
1. Limpieza.
2. Contorno de ojos.
3. Loción o esencia. En este paso añadiríamos principios activos que nos ayuden con nuestras necesidades, son más fluidos que los sérum por ello se ponen antes, si lo que necesitamos es hidratación buscaremos una esencia con hialurónico, si tenemos la piel grasa una loción con ácido salicílico nos ayudará a controlarla, si tenemos la piel sensible una bruma calmante…etc
3. Sérum.
4. Crema hidratante.
5. Protector solar.
6. Mascarilla semanal. En este tratamiento semanal podemos dar un plus a nuestra rutina, aprovechando para potenciar la luminosidad de la piel, con una mascarilla exfoliante o de vitamina c, mejorando textura con una mascarilla exfoliante o hidratando en profundidad con una mascarilla de hialurónico.
En general, las rutinas de belleza son una forma importante de cuidar la salud de la piel y su apariencia. Al seguir una rutina de belleza adecuada, puedes sentirte más confiado y mejorar tu autoestima, además de la calidad y el aspecto de tu piel. No dudes en acudir a nuestra consulta si quieres tu rutina personalizada, adaptada a ti y a tu tipo de piel y necesidades.
Sin embargo, resulta primordial y de vital importancia recordar en todo momento que la belleza interior es mucho más importante que la belleza exterior, y que debes amarte a ti mismo tal y como eres. ¡Cuídate y mímate!
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